Si Colombia como Estado social de derecho (Art. 1) está estructurada para gobernar a toda una población de ciudadanos, (individuos) que en colectividad están llamados a vivir en Justicia, Equidad y el Respeto de sus deberes y derechos como ciudadanos, tal respaldo y defensa de dicho estilo de vida, esta consagrado en la Carta Magna, la Constitución Política del 91 en lo que respecta a los principios fundamentales. ¿Por que existe injusticia, inequidad y cada día hay mas cordones de pobreza que se convierten miseria?

Tal idea de este tipo de Estado carece de argumentos creíbles debido a las acciones que desfiguran el equilibrio y el orden, dicha desconfiguración se da en los propios organismos que componen estructuralmente al Estado. Tómese como antecedente La Corrupción como eje principal que amenaza la responsabilidad política de quienes ejercer el poder para gobernar.


Este acto de Corrupción está configurado desde dos vertientes: 1. El individual (el Alma de cada ciudadano que conforma la sociedad) 2. El Colectivo (En el ejercicio del quehacer político para equilibrio, desarrollo y sostenibilidad social).

Pero quien le garantiza la función y supervivencia a todo acto corrupto, son quienes avalan al corrupto, cuando el silencio impera, cuando se participa de las prebendas y cuando se involucra de la ruleta logística de un quehacer político que se centraliza en los intereses cerrados a la búsqueda de la primacía de los intereses comunes que lleven al desarrollo y a la sostenibilidad comunitaria. todo lo anterior se realiza en las sociedades mas distantes y pocos favorecidas en sus derechos constitucionales.

Mientras todos como ciudadanos no busquemos construir argumentos y acciones que permitan un equilibrio entre el ejercicio individual y la responsabilidad política comunitaria, el Estado será un desprestigio por quienes asumen el poder de gobernar y un ideal comunitario ya que carece de credibilidad para los ciudadanos.

Comentarios

Entradas populares de este blog

SIEMPRE SERÁ POSIBLE TRABAJAR POR LA PAZ Y LA RECONCILIACIÓN DE ESTE AMADO PAÍS.

Reconocer, perdonar y reconciliar, es el camino, un costo colectivo como sociedad colombiana.