PARA LA ‘PAZ TOTAL’ URGE LA NECESIDAD DE UNA PEDAGOGÍA QUE SERIAMENTE FORTALEZCA AL CIUDADANO-CIUDADANÍA EN SU IDENTIDAD Y SU RESPONSABILIDAD DE CONSTRUCCIÓN SOCIAL DESDE EL TERRITORIO.

Tomado de: https://03442.com.ar/2020/08/la-uner-presenta-ciudadania-y-territorio-encuentros-digitales-2020/ 

Durante estas dos últimas semanas en mi ejercicio pedagógico como catedrático en una importante institución de formación, junto con mis alumnos hemos estado analizando la importancia del ser ciudadano, en su identidad, en la responsabilidad y la importancia de proveer seguridad no solo en la convivencia sino en la tarea de ser parte del construir y el mantener el orden dentro de una sociedad democrática y tan diversas como lo es Colombia. Esto nos ha planteado una reflexión articulada con algunas teorías académicas de que el ser ciudadano y/o ser parte de la ciudadanía acarrea una inmensa responsabilidad no solo porque se tenga privilegios (derechos) sino porque en el deber existe la tarea de ser un constructor social, de garantizar el orden y de aportar al desarrollo del propio territorio y/o del país. Ahora bien, para el ciudadano de a pie no se alcanza a desarrollar una absorción profunda ante la ferocidad de un Estado que muchas veces gobierna desprendidamente y tecnocráticamente desde Bogotá y no desde el ciudadano sentado en el taurete debajo de rancha de palma en el patio de la casa del líder comunal. Por ende, con certeza se podría pensar que en la mayoría de las ocasiones el ciudadano ignorara a gran escala no solo su magna tarea y el desconociendo de su identidad, sino que puede ignorar la responsabilidad del Estado en el ayudarle ser un buen ciudadano, esto porque desde los procesos de educación donde la ley de plantea proyectos transversales obligatorios (educación para la democracia), que buscan educar en ciudadanía de una manera práctica en la vida política, no consolidada una integra formación, ya que se continúa educando bajo parámetros que no articulan lo moral y lo político, lo ético y lo jurídico y la vida privada y la vida pública (Díaz-Perdomo, 2017).

Esto nos hace plantear algunas preguntas sobre ¿Qué tan enfocado esta la educación ciudadana en los territorios para que cada persona sea promotor del orden social y del progreso ante una sociedad democrática y diversa? ¿Sé está formando seriamente en educación ciudadana para fortalecer el ser y el que hacer del ciudadano con derechos y deberes desde el territorio? ¿El Estado asume seriamente la tarea de la formación ciudadana no simplemente para que estos cumplan la ley, sino también para que cada ciudadano en su libertad y responsabilidad sea garante del orden y del desarrollo del país? Muchas preguntas y pocas respuestas; se requiere entonces asumir el tema de la educación ciudadana como un valor trascendental en la construcción de la sociedad, pues este debe ser el protagonista importante en la tarea del construir sociedad desde fundamentos de empoderamiento que le permita conocer, analizar, criticar, construir, argumentar y trasformar desde la aplicación de instrumentos para el desarrollo integral, lo que lo hace ser un ciudadano activo y democrático (Concejo de Europa, 2022). 

En este caso cuando se habla de la construcción de una ‘paz total’ como política de Estado no puede ser solo desde una línea con enfoque de desarticular a los grupos violentos sino que también, -lo más importante y necesario- debe involucrar el concepto activo de desarrollo integral de los mismo territorios, impulsados por programas que han de ser el resultado de trabajos mancomunados entre el Estado y la ciudadanía, el Estado no puede imponer su argumento tecnocrático, sino, que sentado con la ciudadanía empoderada ha de construir desde la escucha, el entendimiento y el verdadero discernimientos dialogante, buscando así el bien colectivo. Toda construcción y trasformación social debe hacerse involucrando a los ciudadanos con su participación y su veeduría con el fin de que todo se realice como se acuerda, esto requerirá dos criterios: 

(i) un fortalecimiento y una dinamización de enfoques pedagógicos en una educación ciudadana que capacite y empodere con capacidad crítica y argumentativa para involucrarse en las tareas de la construcción colectiva con el Estado.

(ii) un empoderamiento en la ciudadanía con autoridad ético-moral, socio-político y socio-jurídico que lo lleve hablar de un tú a tú con el Estado.

Por ende, todo ciudadano como sujeto a de ser crítico capaz de desarrollar interacción con el contexto, que le posibilite sensibilizarse con la justicia y dignidad humana; porque no puede ser indiferente frente a la violencia, la explotación y la miseria humana en ninguna de sus formas o manifestaciones (Nieto, 2013). Frente a unas exigencias como por ejemplo la de una ‘Paz total’ urge la necesidad de una pedagogía que seriamente fortalezca al ciudadano-ciudadanía en su identidad y su responsabilidad de construcción social desde el territorio. 

Ahora bien, cuando se busca prepara el PND 2023 -2026, cuyo ejes temáticos esta la apuesta a la ‘paz total’, concordando con el programa del gobierno y cuyo propósito general es el de lograr una paz completa y un buen vivir para las poblaciones urbanas y rurales en el país, logro que necesita asumir algunos propósitos como el de establecer una nueva forma de relación entre el Estado y la ciudadanía, desde el respeto integral de los Derechos Humanos, el reconocimiento de las víctimas, la responsabilidad estatal en múltiples formas de criminalidad y la creación de mecanismos efectivos que promuevan la participación incidente de la ciudadanía (Viva la Ciudadanía, 2022), si bien esto es política de gobierno, esto requiere de una formada conciencia ciudadana, pero la poca trascendencia de la formación ciudadana que hoy se tiene desarrollada en la escuela genera establece una poca vinculación entre el ser ciudadano y el hacer practico de su identidad, lo que revela la existencia de una deficiente inversión en pedagogías transformadoras que ayuden a cimentar conciencia crítica y capacidad argumentativa para poder tener empoderamientos claves desde la territorialidad. 

Aquí no se está denigrando la capacidad racional de los ciudadanos del territorio, en ellos existe una saber propio, una sabiduría, una capacidad de discernir acontecimientos, realidades y comprender que es lo que necesitan para la edificación del desarrollo mismo de sus comunidades, urge tener empoderamiento crítico, argumentativo y de responsabilidad colectiva ante una macro exigencia tecnocrática del Estado, y en el afán del construir hoy una ‘paz total’, no tener presente tales exigencias de desarrollo pedagógico para una educación ciudadana activa y participativa puede desconocer los latentes peligros que a mediano y largo plazo se pueda dar, manifestando así una realidad manipulada, instrumentalizada, engañada, y/o olvidada; por ende, es necesario que las comunidades cercanas y lejanas, tenga acceso a procesos de pedagogías sólidas, dinámicas y serias el cual permitan la construcción de conocimientos y de elementos para la discusión y la edificación de políticas públicas que lleven a una paz integral promovida, garantizada y vigilada por el Estado y los ciudadanos de cada territorio. 

Bibliografía.

Díaz-Perdomo, M. L.-S. (2017). Ciudadanía, una vida posible en sociedad. Revista Aletheia, 9(2), , 114-137. .

Concejo de Europa. (2022). Ciudadania y participación. Obtenido de https://www.coe.int/es/web/portal/home: https://www.coe.int/es/web/compass/citizenship-and-participation

Nieto, Y. O. (2013). La pedagogía y su incidencia en la formación de sujetos. HALLAZGOS, pp. 157-170.

Viva la Ciudadanía. (2022). Diez elementos para la Paz Total en el PND. Bogotá D.C.: Viva la ciudadanía.